«Tú mandas y mandas, por eso estás tan contenta», le decía a su mamá mi prima Lorena, que a los 4 años era una versión mexicana de Mafalda, un día que la estaba regañando, seguro justificadamente.
Y claro, si nos dan a escoger preferimos mandar que ser mandados (de que los mandan, porque de los otros mandados sí hay varios). Para muchos es el objetivo «ser jefes».
Yo frecuentemente escucho frases como «es que yo nací para jefa» (a veces asociada a que no duran en las chambas ¡gulp!), «Yo emprendí porque me choca tener jefes» (emprender no implica que vayas a ser buen jefe, hay que ejercitar la habilidad para no tronar tu empresa) .. Y todo se centra en ser el «mandamás», pero realmente tenemos las características o nos hemos preparado para ser un líder eficaz y no sólo un mandón(a)?
Uno pensaría que ser un buen jefe es cosa de carácter o destino, pero fíjense que no. En un post anterior hablábamos de que las habilidades para ser exitoso en lo que amas en muchos casos no son ser buenísimo en lo técnico de tu negocio o tener un IQ de 200, en muchos casos son «habilidades blandas» como saber escuchar, mediar, dar y recibir retroalimentación efectiva (positiva y negativa), saber construir y hacer equipo, saber establecer prioridades, estar dispuesto a aprender y a enseñar a los demás, hacer networking… y creo que si para alguien son necesarias son para el Jefe.
Muy probablemente si recordamos algún jefe que hayamos respetado/querido/admirado muy posiblemente sí era bueno en lo técnico, pero seguro tenía algunas de estas habilidades. Piensa en por qué respetabas tanto a ese que fue tu jefe favorito. Si yo analizo a mis jefes favoritos creo que mi top es su capacidad de enseñar con sentido del humor y de priorizar en los momentos de presión. Si no puedes pensar en ni un jefe que admiraras posiblemente no son los jefes, son tus «problemas con la autoridad».
¿Pero por qué me dio por escribir de jefes y ser jefe? Hace unos días leí este post de Mombita sobre de dónde provienen los malos jefes (es de una serie sobre buenos y malos y de los costos que genera un mal líder) y señalaba varias causas:
– Venir de un puesto en el que no tienen mando (y esos son los que yo creo que deberían investigar más sobre qué ejercitar).
– Déficit de habilidades gerenciales
– Falta de plan de acción
-Falta de Ignorancia
– Accionistas/ Jefes del Jefe voraces
-Egolatría
– Deshumanización
Y yo añadiría dos más (pueden entrar en alguna de las otras categorías, pero creo que vale la pena resaltarlas):
– Falta de legitimidad y falta de echarle ganitas para construirla.
– Llegar al puesto sin equipo y no lograr construirlo con la gente que ya está en la empresa.
Como verán la mayoría tiene menos que ver con si era el mero mero sabor ranchero en su área de especialidad y más sobre la parte estratégica y las habilidades blandas.
Pero esta es la cara de una moneda. El jefe es el nefasto, tarado, blanco fácil etc… quejarse del jefe es un deporte casi tan practicado como quejarse del gobierno. Siempre se nos ocurren las grandes cosas que haríamos en el lugar de nuestro jefe peor ¿estamos siendo objetivos? ¿Nosotros lo haríamos mejor o en cuanto nos cambiaran de escritorio nos emergería el pequeño tirano desalmado e ineficiente que vemos en nuestro jefe?
Lo curioso de un jefe es que su primer objetivo debe ser la «destalachización», es decir, poder delegar las tareas rutinarias de su puesto anterior, para poder concentrarse en otras más estratégicas que agreguen más valor. ¿Tú sabes cuáles serían si fueras jefe? ¿sabes qué sería lo más importante de hacer y cómo lidiar con la gente si tuvieras el puesto? ¿o sólo te gustaría mandar por mandar?
Parte del tema del jefe es que necesita saber a dónde quiere llevar al equipo, no sólo en términos de resultados, sino hasta de crecimiento. Y repito: llevar al equipo, no sólo saber dónde quiere quedar él en la escalera laboral. No es que te quieras volver la madre Teresa, pero justo uno de los grandes temas es que si tu equipo no crece contigo, tú también te rezagarás porque nunca tendrás quien te ayude a construir.
Puede que hoy no seas jefe, pero para que cuando te toque dures en el puesto tienes que empezar a practicar. No necesita ser forzosamente en lo laboral, Jhon Maxwell (el de las 21 leyes irrefutables del liderazgo) dice que los voluntariados son excelentes lugares para practicar el liderazgo, porque es difícil mantener motivada y participativa a la gente cuando sólo viene por amor al arte (unos meses ok, pero a ver que te aguanten años!).
Pero más allá de eso en tu cabeza ¿quién es un buen jefe? ¿qué características debería tener? ¿cuánto te pareces a esa persona? ¿en qué tienes que chambearle duro para dar el ancho? Me encantará ver sus respuestas en el área de comentarios.
P.D acaba de salir un libro con un título que resume los sentimientos hacía algunos «superiores» : «Cómo trabajar para un idiota»… y el autor se acusa de serlo. Si les picó la curiosidad dénle click aquí.
P.D2 Este es el Volúmen I de una serie, en el próximo episodio les platicaré de los dilemas del «jefe-chavo»…
Era Earl Sinclair 😛
Ya decía yo que por algo San Google no me mandaba a su foto…
Muy buen post, la verdad a mí me costó trabajo desligarme de mis actividades anteriores y no ponerme a hacerle el trabajo a los subordinados.
Es que con eso de que nos dicen mucho que si quieres un trabajo bien hecho lo hagas tú mismo… (y no es cierto)
Hola Sofía! Este post me gusto mucho, y por eso les platicare de dos jefes que he tenido que no son todos…
JD el mejor jefe que he tenido, te hacia sentir la importancia de lo que hacías, te transmitía el sentido de urgencia que ante situaciones complicadas (issues) implicaban análisis y resultados contra reloj, además como maestro no te quedabas con dudas… su frase celebre “Elogios en público, regaños en privado”
Tero mucho mejor en la parte técnica que JD con gran conocimiento de mucho, como dicen todólogo, su error a mi parecer no ayudar a crecer a su grupo… ¿Por qué crees que debes ganar mas si yo a tu edad ganaba mucho menos de la mitad de lo que ganas ahorita? decía constantemente cuando pedíamos apoyo para certificarnos en algo que obviamente le hacia ganar licitaciones a la empresa… su frase celebre, buenos dos “Es tu perro y tu lo bañas” y “Ese no es mi pe…”
Cuando yo fui jefe trate de juntar lo mejor de estas dos personas… y tuve una agradable experiencia de un año como capitán del barco!
Ahora estoy en una nueva aventura nuevamente como subordinado en Nokia Siemens Networks… y gracias a estas experiencias de la vida estoy muy bien.
También me imagino que haber sido jefe te ayuda a entender a tus jefes actuales
Como subordinado nos quejamos de los jefes con sus exigencias y carácter. Pero cuando llegamos a ese nivel sucede que tambien se quejan de nosotros aun cuando juramos y perjuramos que somos diferentes.
Pienso que para saber o aprender a mandar hay que saber obedecer, predicar con el ejemplo.
Y también prepararse en temas de liderazgo, a veces creemos que el conocimiento técnico basta y no
La verdad es que no hay como tratar de aprender de todo lo que te rodea y tener tus sentidos completamente abiertos; no debes desperdiciar la oportunidad de aprender hasta del que te caiga muy mal, la mejora continua es la premisa que debemos tener en cuenta. Y en mi experiencia, lo de delegar responsabilidades es lo que mas trabajo me ha costado.
Excelente post..!!
como siempre me encanta la alimentación y
conocimiento que trasmites Sofía.
Me puso a pensar bastante y estoy buscando mejorar
mi actitud como el patrón….. !!!
Hay muchos aspectos que se pueden mejorar y otros
solo es cuestión de ser paciente.
Espero no sea el único de este tema.
Saludos
Nunca , jamás te quejes que tu jefe es un tonto , un estúpido o un tarado porque recuerda : el fue el que te contrato ; y sólo un tarado contrata a otro ¿no?
El grupo más grande que me ha tocado supervisar era de 130 personas, la mayoría con educación básica y créanme que fue más fácil lidiar con ellos que con las divas con postgrado.
Siempre rote a mis ingenieros para que se quedaran en mi lugar durante mis ausencias, siempre que regresaba me decía «que feo trabajo tienes» y nadie lo quería tomar permanentemente.
El que quiera ser jefe para tener sólo los beneficios sin entender las responsabilidades merece que lo asciendan, y que le den un equipo disfuncional para que sepa lo que es amar a Dios en tierra ajena.
Jajajaja amo tu lógica y tu pedagogía.
Si es bonito ser jefe pero para tu negocio, pero ser jefe para que otro viva si pesa..sobre todo por que te desgasta tanto manejar personal y al final recibas el mismo sueldo. Yo tenia un jefe muy mala persona déspota, griton y tenia personal a mi cargo y me gritaba delante de quien fuera, un día uno de mi personal lo amenazo con golpearlo si me volvía a gritar por que el no sabia como nos costaba sacar el trabajo.Obviamente lo corrió y yo renuncie. pero al menos me quedo la enseñanza de que no es la forma de tratar a las personas y ahora tengo mi propio negocio.
me falto comentar que antes de poner mi negocio tuve otro jefe que era una excelente persona, me exigía trabajo yo lo realizaba y teníamos buena relación. sin ofensas y me dejo mejores enseñanzas.
Yo soy jefa, soy la jefa de 10 personas mayores que yo, al principio me agarraban de bajada por la edad, hubo quien de plano renunció por que no toleraba la idea de que una escuincla de 20 años le diera instrucciones, con el tiempo aprendí que la única manera de hacerme respetar era no cometer una sola equivocación, ser la primera en obedecer las reglas para hacerlas cumplir y, lamentablemente, no entablar más relación que la laboral, tantito entrados en confianza ya creen que puedes hacer «excepciones» por ellos.
La edad es un factor que complica el tema del respeto pero sí es sólo con chamba y calidad que pueden dejar de darte lata con eso
Muy interesante. Considero que un buen jefe es aquél que logra un equilibrio entre confianza y respeto por parte de sus subordinados. De esta manera se asegura de que estos realicen las tareas encomendadas de forma precisa y responsable.
Equilibrio nada sencillo!
¿para cuándo el vol. II?
Jajajaj un par de semanas, tengo que entrevistar a un amigo que es el «jefe chavo»