Icono del sitio Pequeño Cerdo Capitalista

¿Codo o ahorrativo?

Un regio fue la primera persona que me pidió explicar la diferencia entre «Codo y ahorrativo» o «codo y administrado»… no sé si sea por aquello de la fama nacional que tienen (no es cierto, quien los quele, quien los quele), pero a mí sí me parece clave para unas finanzas sanas y hace unas semanas comiendo con @Beatleradio , el adorado productor de @Losdelatarde , volvió a salir el tema.


Alguien codo, tacaño, amarrado, miserable para mí (disculpen amantes de la RAE que no sea la definición oficial) es alguien que sólo quiere acumular y guardar dinero, que le duele gastarlo incluso cuando sus finanzas son equilibradas (no es lo mismo no querer, que no poder), que le cuesta desprenderse de lo material y no puede ser generoso. Por ahí dicen que el que es codo con los dineros también lo es con los afectos. Yo soy una ferviente defensora de que precio no tiene que ver con cariño o generosidad ¡pero tampoco se pasen! ¡no sean marros con ninguno de los dos!

Alguien que es «administrado» o es «ahorrativo» tiene bien claras sus prioridades, en qué sí quiere gastar y en qué no, valora su dinero y por lo tanto no lo desperdicia, es un consumidor inteligente: si puede gastar menos y recibir la misma calidad, busca la forma, tiene bien clarito su presupuesto y sabe cuando se está saliendo del huacal y ni modo, tiene que recortar o buscar nuevos ingresos.

Digamos que el codo NUNCA quiere gastar, sólo se obsesiona con la acumulación por la acumulación, mientras que el ahorrativo elige CUÁNDO gastar.

La bronca es que para el clásico cuate manirroto o amigo gorrón codo es «cuando no te quieres gastar tu dinero en mí» y eso es gandallismo, no una definición correcta. 

Otro punto respecto a esto es que «codo» cuando sólo eres ahorrativo normalmente te puede llamar alguien que o no tiene sanas sus finanzas o que las usa para algo equivocado: para apantallar a alguien más y perdón pero si quieres apaltallar a alguien con tu dinero o lo que tienes, mejor apantállate a ti ¿los otros qué? Ya hemos dicho que con dinero sólo se cubren deficiencias de dinero, las sociales o emocionales hay que ir al psicólogo o conseguirse mejores amigos.

Regresando a Beatleradio, en la comida estábamos hablando de que a diferencia de muchos de sus contemporáneos (apenas llegó al «tercer piso» en su pasado cumpleaños), él en general ha sido ahorrador, pero no al estilo tío Scrooge, sino que va guardando parte de lo que gana para el ahorro en sí y  parte para sus viajezotes, conciertos y las cosas que le gustan.

Él dice que eso se lo aprendió a su papá, que siempre ahorraba una lana para tener el colchón de la familia, el retiro, etcétera, pero que cuando eran viajes o comidas nunca les dijo «no hay» ni los restringió.  Probablemente su papá tenía su «fondo para los placeres» bien asignadito en su presupuesto.

Ser «ahorrativo» o «administrado» te permite tener lana para disfrutar de cosas que no podrás si el super plan te agarró con los dedos en la puerta y sin lana o que al menos realizarlas no te implique estar hipotecando tu futuro. El codo no puede disfrutar nada de eso porque le duele en sí el hecho de gastar, porque ya es un extremista, hay que decirle «bájale dos rayitas».

Para tener unas finanzas sanas es bien importante no confundir esos dos términos. Están tan enfermas las finanzas del cuate que siempre gasta de más y vive endeudado como del que no puede gastarse un peso sin que sienta que se le cae el mundo. 

El gasto es un área de las finanzas y de la vida, que debemos saber manejar y por manejar me refiero justamente a llegar a un equilibrio.

De hecho el equilibrio en lo que sea es lo más difícil de lograr en la vida: comer como troglodita y luego ponerte a dieta y bajar 10 kilos no es difícil, lo difícil es aprender a comer y mantenerte en un peso saludable; lo difícil no es desvelarte toda la noche para sacar la talacha o tarea después de haber flojeado 10 días, lo difícil es ser organizado y planear cuánto tienes que avanzar cada día para trabajar y dormir lo suficiente. Igualito con esto: Lo difícil no es ni ser un despilfarrador de marca ni un codo de lo peor (aunque ambos tengan consecuencias y problemas), el arte está justamente en estar bien administrado para que siempre tengas dinero para las cosas que te importan y dejes de gastar en las que definitivamente no.

Por ahí el dicho dice: todo con moderación, hasta la moderación, así que metan sus finanzas en cintura pero que esto no los prive de destinar lanita a las cosas que les gustan (puede que en casos extremos se tengan que privar un rato pero luego hay que hacerle huequito en el presupuesto) ni les sepulte la generosidad.

Buen jueves! Oink$$$!!!!

No te vayas a la quiebra. Sígueme

Salir de la versión móvil